"Veo la música no como un hobby, sino como un proyecto de vida": Laura Chaparro

Laura Chaparro nos cuenta cómo empezó su formación en los Centros Filarmónicos. Foto: Astrid Melo.
Laura Chaparro nos cuenta cómo empezó su formación en los Centros Filarmónicos. Foto: Astrid Melo.
Publicado:
13
Mar
2021
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Laura Alejandra Chaparro Melo, estudiante de noveno grado del Colegio Enrique Olaya Herrera, hace parte del Proyecto de Formación Musical 'Vamos a la Filarmónica' de la Orquesta Filarmónica de Bogotá́ (OFB). Laura nos contó cómo empezó su formación en la música y lo feliz que esta de regresar a clases bajo el modelo de alternancia en los centros filarmónicos escolares.

Laura se caracteriza por ser una persona alegre, disciplinada, con muchos valores, que práctica patinaje y por su puesto la música. Hace parte del proyecto de Formación Musical 'Vamos a la Filarmónica' desde hace seis años, en el Centro Filarmónico del Colegio Enrique Olaya Herrera, tocando la Viola.

La OFB ofrece procesos de formación en 33 Centros Filarmónicos Escolares, que se desarrollan en Instituciones Educativas del Distrito, en alianza con la Secretaría de Educación Distrital. Además, de 20 Centros Filarmónicos Locales en convenio con los Fondos de Desarrollo Local de cada alcaldía; siete Centros Filarmónicos Hospitalarios y el Programa de Formación Musical - Orquesta Filarmónica Prejuvenil.

“La Viola me inspira protección, por su tamaño y forma femenina, sus melodías son en clave de Do. Cada que tengo la oportunidad de interpretar una canción mis emociones positivas fluyen, me siento segura y me da felicidad compartir la melodía de mi viola ante mis amigos, conocidos y familiares, ha sido gratificante cuando con nuestros compañeros nos presentamos en teatros, recuerdo mucho la presentación del Teatro Julio Mario Santo Domingo ya que ese día nos aplaudieron como nunca”, aseguró Laura.

¿Cómo conociste el Proyecto de Formación Musical 'Vamos a la Filarmónica'?

Estaba en tercero de primaria cuando hicieron convocatorias para niños que quisieran tocar violín; mi mamá de inmediato nos apoyó a mi hermana y a mí, asistió a las reuniones que hizo la Filarmónica nos inscribió y así empecé mi formación en la música.

¿En tiempos de pandemia continuaste en casa con tu formación musical o como fue el proceso?

Si, continué desde mi casa, nos conectábamos por zoom con el profesor de música, el proceso de la clase era de dos horas y 2 veces a la semana en horas de la tarde.

¿Qué piensas del modelo de alternancia de las instituciones educativas del Distrito?

Me parece genial, ya que es necesario vernos con los profesores la conexión al interpretar una obra es incomparable a cuando se hace por zoom, además en mi opinión personal el cuidado va en cada uno, sin querer cuestionar las personas salen a  realizar otras actividades que también pueden poner en riesgo la vida de los familiares o conocidos y a estas no se les coloca problema, pero para ir al colegio he notado que hay muchos que están en desacuerdo y no debería ser así en mi caso el Colegio cuenta con instalaciones apropiadas y espacios grandes para poder recibir las clases con los protocolos de bioseguridad.

Finalmente, Laura envío un mensaje a todos esos niños que tienen este gusto por la música, pero no toman la decisión de formarse: 

Les diría que no pierdan la oportunidad de conocer este gran proyecto donde se distinguen personas que nos guían y forman como son los profesores a los cuales agradezco su apoyo, a mí me ha ayudado a ver las cosas de una manera diferente a valorar más todo lo que la vida nos brinda, ya que es difícil pagar una escuela de música particular, el proyecto nos forma para ver en la música, si se quiere, más adelante como un proyecto de vida o simplemente como un hobby que hace la diferencia entre la juventud de hoy día.  

Aprovecho para dar las gracias a mi mamá Astrid Melo y mi papá Silvino Chaparro, ya que sin su apoyo no hubiera sido posible llegar hasta donde me encuentro el día de hoy con mi música, explorando un talento que no conocía y que gracias al proyecto lo estoy explotando.

Foto: OFB

Más de 28.213 niños, niñas, jóvenes y adolescentes entre los 7 y 17 años se benefician de esta propuesta y reciben formación musical gratuita en orquestas filarmónicas, bandas, coros, ensambles de cuerdas pulsadas, iniciación musical y rítmica corporal, que busca desarrollar sus talentos y propiciar su educación como ciudadanos integrales.

Se estimula en el estudiante el desarrollo de competencias sociales, cognitivas y emocionales promoviendo su participación activa en la comunidad educativa y en su familia. Los procesos pedagógicos y artísticos son llevados a cabo por un equipo de músicos profesionales altamente calificados, que diariamente transforman la vida de los colegios y las localidades con experiencias musicales que fortalecen y complementan la formación general.

A través del programa Centros Filarmónicos de la OFB en Aulas Hospitalarias se busca expandir la atención a niños, niñas y jóvenes que por su situación de enfermedad o incapacidad requieren atención hospitalaria y ambulatoria, con estancia permanente o temporal en algún hospital de la red del Distrito de Bogotá.