La guerra frontal de Peñalosa contra el crimen organizado en Bogotá

- Durante su administración han sido desmanteladas 140 bandas criminales, gracias al trabajo en equipo que lidera la Administración Distrital con la Policía Metropolitana y la Fiscalía.

Durante la administración de Enrique Peñalosa la lucha contra la delincuencia no ha tenido un solo día de tregua, en busca de hacer de Bogotá una ciudad más segura.

A la fecha, han sido desarticuladas 140 bandas criminales que operaban en diferentes sectores de la ciudad y que se dedicaban a diversas actividades delictivas como atracos, hurto, paseos millonarios, robos de celulares, estafas y microtráfico, entre muchos otras.

Este logro se debe al trabajo en equipo que ahora ejercen la Administración Distrital, la Policía Metropolitana y la Fiscalía que adelantan operativos y labores de inteligencia de manera conjunta y coordinada.

El más reciente golpe se dio en estos días en la localidad  Rafael Uribe Uribe donde fue desmantelada una peligrosa banda, de la cual once de sus integrantes tenían antecedentes de homicidio, porte ilegal de armas, tráfico de estupefacientes y hurto calificado.

En los operativos se logró la recuperación de 5 carros, 5 motocicletas, 20 celulares robados, y la incautación de 2.700 dosis de marihuana y bazuco que iban a ser comercializadas en la localidad.

Este hecho se suma a otro importante logro que se anunció  a principios de la semana: la desarticulación de la banda criminal denominada los ‘Pokemonoes’, la cual atracaba tanto a conductores particulares como a transportadores de mercancías en las localidades de Engativá, Fontibón y Chapinero.

Sus integrantes, que se disfrazaban de trabajadores para atracar en las vías vistiendo cascos y overoles, tenían como blancos preferidos camiones que transportaban víveres y electrodomésticos.



Según reveló el secretario de Seguridad del Distrito, Daniel Mejía, la Seccional de Investigación Criminal de la Policía Metropolita les hizo inteligencia durante 8 meses, lo que permitió que a 16 de sus integrantes les dictaran medida de aseguramiento.

“Este es el trabajo en equipo que hemos venido haciendo con la Policía y la Fiscalía, y que seguiremos fortaleciendo para desarticuar estas bandas del crimen organizado en Bogotá”, destacó Mejía.

Y es esta cooperación, precisamente, la que le ha permitido al acalde Peñalosa dar estos duros golpes a la delincuencia organizada.

La lista es larga, comenzando con que se le puso fin a las tres ollas más grandes del narcotráfico en el país: el Bronx, San Bernardo y Cinco Huecos, que por años fueron repúblicas independientes del crimen. El delito menos grave que ocurría en el Bronx era el tráfico de droga.

En estas calles se daba explotación sexual infantil, trata de personas, secuestros, maltrato, instrumentación de niños, niñas y habitantes de calle, receptación de objetos hurtados y asesinatos y desmembramientos de personas.

Desde la intervención, y hasta la fecha, se han logrado capturar a más de 100 integrantes de los tres ‘ganchos’ o clanes que operaban en el Bronx (Manguera, Payaso y Mosco).

Tres meses después de la intervención, y en comparación con igual periodo del año pasado, los homicidios en la localidad de Los Mártires bajaron 72%. El hurto de celulares también se redujo en 17%, al igual que las lesiones personales que cayeron un 66%.

El año pasado también se desmanteló, por ejemplo, a las ‘Damas de la Noche’, una banda que se dedicaba al ‘paseo millonario’ y cuyas víctimas eran principalmente mujeres. Hubo 19 capturados. También  cayeron ‘Los Sureños’, ‘Los Tierreros’ y ‘Tierreros de Suba’,  organizaciones delictivas que se apropiaban de terrenos por medio de familias desplazadas de escasos recursos económicos.



Las autoridades también pusieron tras las rejas a los ‘Tierreros Molinos’, a cuyos integrantes se les imputaron los delitos de concierto para delinquir, invasión agravada, estafa en masa, falsedad, fraude procesal y urbanización ilegal. Esta organización estaba formada por 16 personas.

En julio se golpeó una banda que durante 15 años dominó el negocio del microtráfico en los alrededores de los colegios del sur de Bogotá. La banda, llamada ‘Los Calvos’, estaba integrada por 12 miembros de una misma familia que operaba principalmente en la localidad de San Cristóbal. A la semana, por la venta de la droga, obtenían ganancias semanales de 16 millones de pesos aproximadamente.

“En la campaña dijimos que íbamos a declararle la guerra a los que les vendían droga a nuestros niños y hoy estamos haciendo un esfuerzo enorme por mejorar la seguridad en todos los entornos escolares”, aseguró entonces el alcalde Peñalosa.

En agosto, el mismo alcalde Peñalosa anunció que las autoridades capturaron a 21 personas, seis de ellas policías, que conformaban una banda dedicada al robo en TransMilenio. Según la información de inteligencia, la banda actuaba en las estaciones de Ricaurte, Sabana, Universidad Nacional, CAD, Campín, Banderas, Calle 26, Profamilia, Calle 45, Marly, Calle 57, Calle 63, Calle 72, Calle 72 y los portales de Américas y Suba.

Posteriormente, en noviembre, se dio captura a 'Las Encantadoras', seis mujeres que se dedicaban a escopolaminar y a robar señores en los bares de Bogotá.

Ese mismo mes, y tras varias semanas de investigación y seguimiento, se dio captura a otro grupo delincuencial que opera en la localidad de Suba, acusados de fleteo, atraco a taxistas y asalto a transeúntes.

Se trató de individuos entre los 18 y 27 años quienes, según las autoridades, tenían azotados a ciudadanos y conductores que frecuentaban el noroccidente de la ciudad.

De esta manera el trabajo conjunto entre la Alcaldía, la Policía Metropolitana y la Fiscalía está arrojando resultados muy positivos y contundentes para hacer de Bogotá una ciudad más segura.



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