Participe en convocatoria 'Ser Urbano' para realizar cortometrajes

Publicado:
17
Sep
2014
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Hasta el próximo 8 de octubre de 2014 está abierta la convocatoria 'Ser Urbano', creada para fomentar la creación de siete cortometrajes audiovisuales, entre 7 y 10 minutos de duración, que permitan reflexionar sobre el control social y la cultura ciudadana.

El llamado es para los grupos de creación audiovisual con jóvenes entre 16 y 30 años de edad, de las localidades de Bogotá, que estén interesados en contar a través de imágenes en movimiento, sus visiones y aportes en cuanto a la construcción de ciudadanías que apuesten por la defensa de lo público y expresen su intolerancia con la corrupción en todos los ámbitos públicos y privados.

Los proyectos se recibirán hasta el miércoles 8 de octubre en IDARTES (calle 8 No 8 – 52), de 9:00 a.m. a 12 m. y de 2:00 p.m. a 5:00 p.m. Los resultados de los ganadores se publicarán el 15 de octubre. Los rodajes se realizarán desde mediados de octubre hasta finales de noviembre de 2014, en Bogotá.

Los trabajos seleccionados tendrán acompañamiento de profesionales en el área de fotografía, cámara, dirección, sonido y montaje, además de la financiación para la realización del mismo. También recibirán asesoría en cultura ciudadana, control social, cuidado de lo público, transparencia y temas relacionados con corrupción, durante el proceso de estructuración del proyecto, previo a su presentación.

La convocatoria está organizada por la Veeduría Distrital y la Gerencia de Artes Audiovisuales del Instituto Distrital de las Artes ( IDARTES), a través de la Cinemateca Distrital.

En el año 2013, fueron seleccionados los cortometrajes 'Ironía', 'Y tú ¿a qué juegas?', 'Todo ciudadano la lleva', 'Ríos de San Cristóbal', 'El parqueadero' y 'Nosotros lo llamamos', con los cuales los jóvenes mostraron de manera creativa y ejemplificante temas relacionados con cambios de comportamientos hacia una cultura de la legalidad, de manera que la sociedad disminuya las justificaciones para violar la ley, los atajos tramposos y la cultura del “todo vale”.